Descubre el encanto de rodearte de Margaritas
Las margaritas son frescor y alegría, a continuación te contamos cómo rodearte de margaritas para hacer que estas hermosas flores florezcan en tu jardín
Las margaritas son flores perennes muy conocidas por sus vibrantes colores y sus flores de cabeza ancha y llamativa. Quedan perfectas en maceta o directamente en parterres o borduras en el jardín, proporcionando un toque de color durante la primavera y el verano. Te vamos a contar más sobre estas hermosas flores y cómo cuidarlas adecuadamente.
Existen muchos tipos de margaritas, cada uno con sus propias características únicas. Algunos de los más populares son:
Margarita africana (Osteospermum):
Esta es una margarita de origen africano que se destaca por su colorido y su capacidad para florecer en casi cualquier entorno.
Margarita Shasta (Leucanthemum x superbum):
Una de las variedades más conocidas, esta margarita blanca presenta pétalos largos y finos y un centro amarillo brillante.
Argyranthemum frutescens, o magarza:
Es una especie de planta medicinal perteneciente a la familia de las asteráceas, originaria de las Islas Canarias. Es un arbusto que puede alcanzar 1,5 metros de altura. Tiene las hojas lobuladas, y forma inflorescencias que pueden ser blancas, amarillas, etc. Florece de primavera a otoño.
Euryops Chrysanthemoides:
Arbusto ornamental de bajo porte, perteneciente a la Familia Asteraceae. Esta margarita se caracteriza por su floración amarilla. Se trata de un arbusto compacto, densamente ramificado, frondoso, de hoja perenne, que alcanza un tamaño de 0,5 a 2 m de altura.
Aunque son muy resistentes y son generalmente plantas de bajo mantenimiento, pero, aun así, las margaritas requieren ciertos cuidados para mantenerse saludables y florecientes.
Luz solar: Las margaritas florecen mejor a pleno sol, por lo que debes asegurarte de ubicarlas en un lugar soleado.
Riego: El riego moderado es crucial para mantener las margaritas saludables. Riégalas regularmente, pero asegúrate de no regarlas en exceso.
Suelo: Las margaritas prefieren suelos bien drenados y fértiles. Si es necesario, puedes agregar compost o fertilizante para mejorar la calidad del suelo.
Poda: Retira las flores marchitas para fomentar el crecimiento de nuevas flores. También es importante podarlas al final del verano para evitar que crezcan demasiado y se vuelvan demasiado densas.
Abono: Para que tus margaritas crezcan y florezcan sanas y fuertes, te aconsejamos fertilizarlas durante la primavera con Compo Guano Fertilizante, un abono universal orgánico-mineral que contiene sustancias nutritivas y compuestos orgánicos ideales para plantas de interior y terraza. Estimula el crecimiento, el aroma y la floración de plantas. También puedes usar el Compo Fertilizante Universal, indicado para todo tipo de plantas.
Si prefieres un abono granulado, te recomendamos el Compo Abono Azul Universal Blaukorn, ideal para todos tipos de cultivos de huerta (incluidas frutas y hortalizas) y plantas. Es ideal para tener unas plantas sanas y una cosecha abundante. Su elevada solubilidad facilita la retención de agua y permite aguantar la sequía.
Dónde plantarlas: Las margaritas son perfectas para jardines soleados y se pueden plantar tanto en macetas como en el suelo. Asegúrate de que el suelo tenga un buen drenaje y que las plantas reciban suficiente luz solar para florecer adecuadamente.
Las margaritas son una excelente opción para agregar color y alegría a tu jardín. Con los cuidados adecuados, estas hermosas flores pueden florecer durante todo el verano y añadir un toque de encanto a tu espacio al aire libre. ¡Así que no dudes en plantar algunas margaritas y disfrutar de su belleza en tu jardín!